PROFECÍA INDIA Sólo después de que el último árbol sea cortado. Sólo después de que el último río sea envenenado. Sólo después de que el último pez sea apresado. Sólo entonces sabrás que el dinero no se puede comer.

sábado, 30 de abril de 2011

HOMENAJE A ERNESTO SÁBATO. FRAGMENTOS DE LA NOVELA " LA NOCHE DE LA FLOR DEL CACTUS" ANA MARÍA MANCEDA


             La jornada había sido intensa y todos estaban agotados. Inés aceptó la invitación de pasar la noche en casa de su hermano. Luego de despedir a Victorio, bajo la promesa de éste de ir a preparar la materia que tenía pendiente hace meses se dedicó a  los mellizos. Éstos se alborotaron más de la cuenta y acapararon la atención de su tía,  los disfruto al máximo, los acompañó en su baño, los ayudó a ponerse los  pijamas y ante la insistencia de los mellizos les leyó unos cuentos condimentados con datos de cosecha propia. La dejaron sin imaginación, las preguntas sobre brujas y monstruos se mezclaban con personajes reales, debió buscar la forma de no alarmarlos y así lograr  que se durmieran plácidos.

             Una vez  en su dormitorio, Inés se preparó a disfrutar de la soledad y el silencio que reinaba en la casa, situada en la zona aledaña al centro de La Plata, donde predominaban casa-quintas o residencias de fin semana. Se dispuso a seguir leyendo “Sobre héroes y tumbas” de Ernesto  Sábato,  se sentía más  madura para interpretarlo, lo había intentado cuando tenía diecisiete  años, pero le fue imposible  seguir esa manera  en la que el escritor expresaba la simultaneidad de pensamientos diferentes e inconexos casi al mismo tiempo, de esa permanencia del pasado en el presente, sin estar organizado cronológicamente. Siguió leyendo un rato, el cansancio la fue venciendo, el libro se le cayó de las manos y se durmió. El tiroteo comenzó a la madrugada, Inés se despertó aterrorizada. ¡Pedro...Pedro!Creía vivir la trágica noche del asesinato de su hermano menor, su cuerpo paralizado parecía a su vez correr por los pasillos de la casa, se mezclaban el sonido del tiro con el murmullo del movimiento de las ramas del bosque y  el  salto de las aguas de la cascada...´

Fragmentos de la novela "LA NOCHE DE LA FLOR DEL CACTUS",capítulo " Semana Santa en Gonnet" de Ana María Manceda

domingo, 10 de abril de 2011

¿ DE QUÉ LIBERTAD ME HABLAN? ANA MARÍA MANCEDA. ARGENTINA

Soy mujer, intelectual, con estudios universitarios. Soy de la generación  que tenía a la familia como el centro de la sociedad, ella era el átomo del tejido social. Viví mi vida como quise, por elección. He tenido maravillosos resultados para mi espíritu.  ¿Pero de qué libertad me hablan? Somos de la generación que lleva la casa, trabaja en su profesión, aporta en la economía del hogar, ayudamos a nuestros padres, a nuestros hijos y daríamos la vida por ellos. Esto sería maravilloso si no cupieran tantas diferencias. Existen mujeres que nunca trabajaron  fuera de su hogar (sabemos que en el hogar se trabaja sin descanso y sin ningún sueldo). Existen las otras que priorizan sus vidas profesionales, luego el hogar, al fin el divorcio ¿Y los hijos? ¿Y el hombre dónde está? ¿Dónde está el camino que nos lleve a una sociedad justa, con inclusión social, con hogares relativamente armónicos? Es muy difícil la respuesta. Pero creo que mientras las mujeres estemos solo preocupadas por  los “los pilates” , los “ spas”, las “cirugías” y los hombres buscando “sus caretas” más adecuadas para aparentar una edad que  no puede ganarle a la biología y un matrimonio que busque  un “country” para demostrar ante el mundo que “valen algo” no tendremos hijos protegidos ni ciudadanos positivos que  construyan una sociedad que por lo visto va camino al abismo. Amo mi libertad pero sé que está atada a pequeñas renuncias de mi “ego” y por sobre todo al amor que siento por los míos. ¿Conservadora, estúpida, vieja? No me importa. Es lo que pienso. Es mi libertad.***